El efecto del sol de otoño sobre los tupinambos

Loli midiéndose con los tupinambos

Igual que en las jornadas anteriores, este domingo los tupinambos de la entrada al huerto seguían siendo los auténticos protagonistas. Han crecido muchísimo y son más numerosos que los que hay en los bancales del huerto viejo. Al estar en la entrada prncipal es imposible no reparar en ellos y pocos pueden resistir el impulso de hacerles una foto o de posar junto a ellos.

Hoy ya se han empezado a hacer los carteles de baldosas con los nombres de árboles y plantas. Como el agua de la lluvia siempre acaba borrando lo que se escribe en estos carteles, varios hortelan@s han traído botes de esmalte de uñas que no van a usar para probar si de esta forma las letras aguantan mejor. Los colores que hay disponibles son realmente variados y vistosos. Hay de color rosa, verde, había incluso uno de color naranja. La lista de nombres es muy larga pero ya hay hechos unos pocos carteles que se pueden empezar a colocar. Se va despacio porque además de escribir los nombres, las baldosas hay que ir cortándolas en tamaños adecuados con mucho cuidado para que no se rompan. Aunque las que ya están hechas están quedando muy bien, habrá que esperar a que llueva para ver si las letras superan la prueba de la lluvia.

A lo largo de la mañana los hortelanos y hortelanas fueron llegando a distintas horas, cada uno por su lado comprobando una u otra cosa. Se cosecharon las acelgas y las guindillas de la zona A, se rellenaron las ollas de los árboles de fuera, se revisó la compostera de moscas soldado negras, se les quitaron a las tomateras las hojas secas... La tarea que está costando más completar es la de quitar la grama de algunos de los bancales del huerto nuevo. En algunas partes la hierba había crecido tanto que hubo que echar mano de hoces y azadas. Además de las acelgas y de las guindillas también se recolectaron pepinos, tomates, habas, pimientos y una calabaza.

Y los que todavía estábamos al finalizar la jornada pudimos degustar una rica lasaña vegetariana que Charlotte y Niklas habían preparado y traído para compartir.